Ubicadas a pie de sierra, en Santa Marta del Cerro (Segovia), entre las Hoces del Riaza y las Hoces del río Duratón
En dos casas muy próximas la una de la otra, las puedes alquilar conjuntamente o por separado.
Las casas están totalmente rehabilitadas en piedra y madera, conservando la estructura original.
Televisión, DVD o vídeo, equipo de música, calefacción, chimenea, lavadora, lavavajillas, microondas y colección de juegos.
Cuna disponible, documentación sobre la zona, restaurante (público), servicio de comidas y cenas y venta de productos locales.
Además del descanso y el relax puedes hacer senderismo, bañarte en piscinas naturales, rutas a caballo, rutas en bicicleta, piragüismo y esquí
Hemos estado toda mi familia (17 personas y mascota) en las maravillosas casas que tiene Nieves, y no queríamos irnos, estábamos tan a gusto, y todo estaba tan bonito decorado, un detallazo por su parte, puesto que hemos estado en Navidad.
Las casas son muy amplias, preciosas, decoradas con mucho gusto, no les falta de nada, super calentitas y muy limpias, ante cualquier duda Nieves siempre esta dispuesta para facilitare cualquier cosa.
El entorno es ideal para dar buenos paseos y empaparte de naturaleza.
Recomiendo al 200% estas casas, estas navidades han sido las mejores.
Gracias Nieves, un abrazo
Nos encantaron las casas …muy limpias y muy calentitas. Nieves nos trato fenomenal. El pueblo no puede ser más tranquilo. Y tiene mucho entorno cerca para visitar.
Un entorno precioso, rodeado de naturaleza y animales preciosos. Ponis , ovejas…Un pueblo muy tranquilo con paseos por la orilla del rio muy tranquilos. Fuimos con amigos y niños, los niños han disfrutado muchisimo: el pueblo tiene una pista de frontón donde se pasaban horas y horas jugando, conviviendo también con los niños del pueblo. También tiene un parque con aparatos para gimnasia al aire libre.
Todos los dias viene una furgoneta de Riaza para vender pan, el frutero, etc. Muy cerquita de las Hoces del rio Duratón.
Las casas estupendas, con barbacoa, chimenea…etc. Por la noche solo se oían los grillos…ideal para descansar…y hacer turismo rural. Muchas gracias a los dueños por la acogida.Chelo.